Milán. Esa encantadora ciudad.

Damos la bienvenida a  Cecilia Sosa.

Mi primera vez en Milán. By Cecilia Sosa.

La primera vez que visité Milán como turista fue exactamente hace 7 años. A día de hoy, marzo 2020, esta ciudad en reposo por el Covid-19, descansa y “se da un respiro profundo” para, con más fuerzas, hacerse notar como lo ha hecho hasta ahora. 

Hace 3 años que llegué a esta encantadora ciudad, a Milán. Recuerdo que no fue un amor a primera vista, ya que arquitectónicamente la caracteriza una escala de grises, aún así fui paciente y sin grandes expectativas me dejé enamorar. 

Con el paso de los días, ese gris se fue convirtiendo en una explosión de colores. Todo ello gracias a sus tranvías amarillos, a sus fachadas de mujeres vestidas de “Liberty”, a sus originales e innovadores escaparates del famoso “ cuadrilátero de la moda ” , también a su espléndido arte urbano lleno de expresión y mensajes a veces contundentes. Y, ¿cómo no engancharse a los deliciosos capuchinos con “textura de nube”?

Después de ese café ¿por qué no adentrarnos en sus parques de altos árboles verdes, alguno de ellos llenos de almas que cuentan historias intensas e interesantes. Y, ¿sus museos de arte?, una gran cantidad de ellos en donde sumergir la mirada y deleitarse tanto por la técnica como por la creatividad. Podría tratarse de una especie de “gran Tour del arte” que puedes hacer en bicicleta, metro, tranvía, o a pie y lo podemos empezar por el Palazzo Reale en donde estuvo expuesto, después de la II guerra mundial el Guernica de Picasso y en el cual se pueden ver las huellas de los bombardeos que golpearon la ciudad de Milán. 

A continuación podemos pasar por el Museo del 900, que está justo al lado y nos adentraremos a descubrir el arte del siglo XX italiano y sus vanguardias tales como el futurismo. Y ¿qué pasa con los niños y el arte? También Milán nos ofrece una infinidad de actividades para ellos. Un ejemplo es el MUBA, museo dedicado a los niños en donde tú, mamá, papá, abuelo o tío podrás volver a ser niño en un abrir y cerrar de ojos. 

Milán es una ciudad viva, dinámica, en la que perderte culturalmente. Un ejemplo de como pasado y futuro conviven para ofrecer una oferta cultural de alto nivel en Italia.

Una ciudad que se vuelve infinita según la conoces. Milano

Asimismo cabe destacar un montón de rincones en los que se hospedan villas con un encanto y particularidad especial, ejemplo de ello es la Villa Necchi Campiglio, proyectada por uno de los arquitectos más importantes e innovadores de principios del siglo XX, Piero Portaluppi. 

Y, como no acabar nombrando a la joya por excelencia milanesa, me refiero a su señora catedral del Duomo, símbolo y orgullo de los Milaneses desde hace seis siglos. 

Todo esto unido a la tradición gastronómica italiana y al propio idioma en sí, con su particular lenguaje corporal, hacen de Milán y su gente un lugar que tienes que visitar no sólo una sola vez en la vida. Si bien sabemos que es la ciudad financiera e industrial por excelencia, gracias a sus ferias internacionales que atraen a millones de profesionales cada año, debemos añadirle algo más. 

Cultura Sí a través de la comunidad  Un madrileño en Europa te quiere enamorar y hacer descubrir esta ciudad desde otra perspectiva, desde la mirada de la experiencia personal, del roce diario que es, como dicen, quien hace el cariño y de donde surge el amor. Siente, ama y vive Milán con nosotros. 

En esta primera presentación que hago junto a todo el equipo de unmadrileñoeneuropa.es y vivireneuropa.eu he querido traerte 3 recomendaciones que personalmente me encantan. En la sección de cultura de la página podrás encontrar muchas más, además de las que vaya actualizando.

Recomendaciones muy personales , de Milán. Italia.

• Gallería de Italia: Sumérgete en el arte lombardo del 800 y del 900. 

Este imponente edificio ubicado entre la via Manzoni 10, via Morone y la piazza della Scalla, alberga las colecciones de arte de la Fondazione Cariplo y de Intesa Sanpaolo que se encuentran en las salas del Palazzo Anguissola, Palazzo Brentani y en el edificio de la sede histórica de la Banca Commerciale. 

Recuerdo la primera vez que entré por casualidad en el, al subir las escaleras de la entrada principal, señorial y elegante, cogí un folleto de la didáctica y otro de la muestra temporal de aquel momento y pensé eufóricamente; ¡qué guay sería poder trabajar aquí!. Un año y medio más tarde comenzaba a colaborar con ellos. Un sueño hecho realidad. 

Volviendo al museo en sí, podremos disfrutar, nada más y nada menos, que de 197 obras del siglo XIX italiano y una importante sección dedicada al siglo XX. El recorrido expositivo fue diseñado por Fernando Mazzocca, y trata de ir descubriendo la ciudad de Milán desde el momento que fue considerada como capital de la cultura, protagonista del romanticismo y la industrialización, además de otros movimientos artísticos propios de Italia, tales como el divisionismo. 

Un auténtico elenco de obras pictóricas en su mayoría, en las cuales se ilustra la sociedad milanesa en época de guerra, la evolución del entono de la catedral de Milán y su particular luz, el inicio de una Italia independiente como país unificado, y escenas de la vida diaria de aquel entonces y otras muchas curiosidades con el apoyo de paneles explicativos y recursos digitales. 

 Cabe destacar a artistas del calibre de Antonio Canova a través de sus excelentes bajos relieves en yeso; los dos Foscarí de Fco Hayez, los hermanos Induno, Giovanni Segantini, Giovanni Boldini o Telemaco Signorini, Umberto Boccioni, Gaetano Previati, Enrico Baj, Alberto Burri, Lucio Fontana entre otros. 

• Plaza de San Fedele: tómate un respiro al sol. 

Esta plaza está ubicada muy cerquita de la Galería de Italia y de la Galleria de Vittorio Emanuelle II. Es a donde suelo ir después del trabajo. Sentada en las escaleras de la hermosa Iglesia de San Fedele almuerzo con taper en mano bajo el magnífico sol de Milán. 

La iglesia fue bautizada con el nombre de Santa María de Solariolo, en el siglo IV y más tarde durante el siglo XI la rebautizaron con el actual nombre. Se reconstruyó gracias a los Jesuitas en el año 1569 para la cual participaron diferentes arquitectos. 

Arquitectónicamente se caracteriza por una sola nave y arcadas sujetas por columnas de granito de Baveno. En su interior observamos capillas, y sobre el ábside encontramos un coro del 500 que anteriormente estaba ubicado en la antigua iglesia de Santa María de la Scala, en donde se encuentra el famoso y conmemorable teatro a día de hoy. Dicen la leyenda que bajo la iglesia se encuentra el corazón de la hija del duque Raniero.

A veces te llega el olor a sahumerio. La iglesia es muy visitada por sus fieles, normalmente personas mayores vecinos del propio centro histórico, que no dejan de entrar para recitar la oración del día. Y por supuesto la visitan una multitud de turistas que llegan para admirar su belleza arquitectónica. 

En el centro hay una estatua conmemorativa a Alessandro Manzoni, realizada por el escultor Francesco Barzaghi (1883). Algunos comentan que este iglesia fue donde el notable escritor conectaba con Dios y uno de los últimos lugares que visitó antes de su muerte. 

Lo que más me gusta de esta plaza, es la paz que transmite. No se si será por el momento de pausa y reflexión que tengo y me ofrezco, no se si será por el contexto arquitectónico e histórico que me rodea y valoro, pero absolutamente en uno de los lugares a los cuáles debes ir cuándo visites Milán. Te invito a comprarte un delicioso panino y experimentes tu mismo todas estas sensaciones. 

• Flagship store - Lavazza: date un chute de energía con un buen café. 

Ubicada en la plaza San Fedele, es aquí donde después de mi almuerzo en la plaza San Fedele tomo un buen café en la barra del bar. Además lo sirven con un chocolate y un pequeño vaso de agua con gas. 

Me gusta disfrutar de este momento observando el entono. El diseño del lugar está realizado con muchos detalles y elementos que no te puedes perder. Una especie de nube – instalación cuelga del techo, y en la pared puedes observar varios lienzos muy originales con motivos de plantas en donde predominan los colores cálidos en contraste con tonos fríos. Reflejos dorados, bronce y plata que contrastan con el azul, toda una experiencia de diseño puro italiano. 
A si mismo puedes pedir y comprar para llevar café procedente de diferentes partes del mundo, entre los cuales encontramos café de Utopia, de Uganda, de Colombia o del Salvador. 

Pero esto no es todo, no solo podrás disfrutar del café y de su cultura, si te da hambre podrás descubrir una diversidad de platos que mezclan la innovación con la tradición gastronómica italiana. Destaco la deliciosa crema de calabaza, el vitello tonato, su particular gaufe salado, su delicada ensalada césar, y como postre recomiendo la spugna de tiramisú, un auténtico suspiro dulce para continuar tu viaje por Milano motivado y sobre todo con energía. 



Para nosotros la cultura es la expresión de un lugar, de una sociedad, de su pasado y de su futuro. Por ello estamos muy orgullosos de poder iniciar a caminar de la mano de cultura si by Cecilia Sosa, en las expresiones y novedades culturales de Milán.

Por cierto, si acabas de llegar a Italia o conoces a alguien que lo ha hecho, te recomendamos que te descargues nuestra Guía de Primeros pasos en Italia. Es totalmente gratuita y está realizada por todo el equipo para que ayudarte en todas las etapas. ¡Hazte con ella ahora mismo en el botón naranja inferior!

Tómate un tiempo para ver todas las actividades, eventos y contenido que hemos preparado en nuestra sección cultural. 

Recuerda que nuestra comunidad es abierta a todas y todos, así que si quieres compartir tus emociones y contenido con nosotros, ponte en contacto.

BIENVENID@ A ITALIA

Tu comunidad en español de Expats en Italia.

Conoce nuestros servicios orientados al expatriado que quiere vi vir en Italia.